Este es un artículo que trata sobre la despoblación, mal que afecta a una gran parte de España. Se va a centrar, como es lógico, en nuestras Sierras. Voy a hacerlo trascender de la llamada Zona PuraSierra, la cual abarca en parte o en su totalidad hasta 75 municipios, todos encuadrados en lo que muchos llaman, atendiendo a la orografía, el Sistema Ibérico Sur. La razón es que hay otra serie de términos municipales limítrofes que comparten con los citados muchísimos rasgos geográficos, demográficos, etnográficos, culturales y de otros tipos.
Después de que el INE (Instituto Nacional de Estadística) publicó los datos de su Padrón Continuo relativos a 2014, PuraSierra presentó a sus lectores el artículo titulado La demografía serrana. Introducción a la Serranía Celtibérica. En el mismo se ofrecían datos referidos a todos los municipios de la zona definida en el párrafo anterior. Hacen un total de 131, distribuidos todos ellos alrededor del mágico vértice que une las provincias de Cuenca, Guadalajara y Teruel.
Recientemente el mismo organismo ha publicado los correspondientes al año 2017. Por eso parece buena idea hacer balance y decidir si tiene base la opinión, creo que muy generalizada, de que la despoblación es el problema más importante que se cierne sobre estas queridas tierras.
Las líneas fronterizas están trazadas por la mano del hombre y sujetas, por lo tanto, a criterios que pueden llegar a ser muy arbitrarios en su definición. Lo prueba el hecho de que son muy cambiantes a lo largo del tiempo y dependen de la coyuntura política de cada momento histórico. No existen fronteras naturales, aunque sí pueden aprovecharse accidentes de este tipo para delimitar el trazado de alguna parte de un límite a establecer. Como se comentaba en el artículo citado más arriba, PuraSierra no cree demasiado en las fronteras, aunque es claro que una correcta administración precisa que existan. En el caso que nos ocupa, y teniendo en cuenta lo dicho, esos 131 municipios forman un conjunto bastante homogéneo en cuanto a los aspectos ya citados. No cabe duda de que alguno podría sobrar o algún otro podría ser añadido. No obstante, a los efectos del tema de la despoblación, que es lo que nos ocupa, ello no tendría mucha relevancia en la lectura final que podamos hacer tras analizar los datos aportados.
Es preciso, sin embargo, fijarnos en ciertas líneas fronterizas para tratar de afinar el análisis que se hará más abajo. Es comúnmente aceptado, y bastante coherente teniendo en cuenta lo dicho en el párrafo anterior, que todos estos municipios pueden distribuirse en cuatro zonas o comarcas. Hablamos de la Serranía Alta De Cuenca, la Serranía Media y la Baja de Cuenca (que, para acortar, voy a nombrar como "Resto Serranía De Cuenca"), la Sierra De Albarracín y la Sierra De Molina, asimilable al concepto de Alto Tajo o a una buena parte del antiguo Señorío De Molina. Esta división es particularmente política, pero no por ello deja de afectar significativamente a sus territorios. No es lo mismo, sobre todo a efectos económicos y de mejor o peor administración, pertenecer a una zona que a otra.
Vamos a ver los datos concretos publicados como definitivos para 2017. La tabla que se presenta, ordenada alfabéticamente, tiene el mismo diseño que las mostradas en el artículo referenciado y se ha preparado de forma que podemos observar los siguientes valores para cada municipio:
- Nombre del municipio con indicación de su comarca y provincia
- Extensión del mismo (en kilómetros cuadrados)
- Población total en 2014
- Población total en 2017
- Variación entre ambos años (en rojo y negativo si hay pérdida de población)
- Densidad de población en 2017 (en habitantes por kilómetro cuadrado)
Es importante fijarse en el color utilizado en el fondo sobre el que se inscribe el nombre del municipio. Si es verde muy destacado, indica que el número de habitantes del mismo se ha mantenido o ha crecido en los últimos tres años, lo cual ocurre en 17 casos, de los cuales en dos no ha habido cambios. Si tiene tonalidad amarronada, significa que su porcentaje de pérdida de habitantes en dicho período ha sido superior al 20%. Esto sucede en 12 ocasiones.
Dada su importancia, es preciso aclarar un extremo sobre uno de los municipios incluidos. Como se explica en el artículo de PuraSierra titulado El curioso término municipal de Cuenca, al mismo, por razones históricas, le corresponde una importante área de carácter forestal y agropecuario, la cual está, casi por completo, deshabitada. En la fila correspondiente se han indicado los habitantes de Valdecabras, su única población netamente serrana. En cuanto a la extensión, la del término municipal completo es de 911,06 kilómetros cuadrados. Haciendo las correspondientes mediciones el cálculo arroja que 694,37 de ellos pertenecen al área serrana. Como curiosidad, la población total de Cuenca ha pasado de 55738 habitantes en 2014 a 54876 en 2017.
Los resultados sugieren muchos comentarios. Dejémoslos para después de ver y pensar un poco en estos fríos números que son un reflejo de la demografía serrana actual:
Desgraciadamente, las primeras ideas que se me ocurren a la vista de estos guarismos son casi las mismas que las expuestas en el artículo que mostraba la evolución entre 2013 y 2014. Ahí van:
- La densidad de población media (2,83 habitantes por kilómetro cuadrado) es insólita en cualquier región europea, con excepción de las áreas más remotas de Laponia.
- Para tener una idea comparativa, digamos que la densidad media en Aragón es de aproximadamente 28, la de Castilla-La Mancha, más o menos de 26 y la española en su conjunto, de unos 93.
- La tendencia es, de momento, imparable. La población disminuye año a año. Muchas decenas de ellos tendríamos que retroceder para ver cambios en la misma.
- Las cosas son aún peor de lo que estos datos oficiales muestran. Todos sabemos que hay gente empadronada en un pueblo que vive en el mismo solamente durante una parte del año.
- Cualquiera que conozca, aunque solo sea mínimamente, la vida serrana, sabe que las personas empadronadas tienen una edad media muy avanzada. En esencia, son los que van quedando. Ni llegan personas foráneas ni retornan los que se fueron. Esto es garantía de decadencia.
Comarca
Provincia(s)
|
Extensión
|
P 2014
|
P 2017
|
%
|
Densidad
|
Serranía
Alta De Cuenca
Cuenca
|
1845,03
|
2908
|
2635
|
-9,39
|
1,43
|
Resto
Serranía De Cuenca
Cuenca
|
3987,26
|
14222
|
13263
|
-6,74
|
3,33
|
Sierra De Albarracín
Teruel
|
1414,11
|
4690
|
4483
|
-4,41
|
3,17
|
Sierra De Molina / Alto Tajo
Guadalajara
|
1918,87
|
6022
|
5591
|
-7,16
|
2,91
|
Todas las zonas
Cuenca, Guadalajara, Teruel
|
9165,27
|
27842
|
25972
|
-6,72
|
2,83
|
Tengo experiencia, como otras muchas personas, en prolijas discusiones sobre si tal pueblo es más alcarreño que serrano, si tal otro es más alto serrano que bajo o medio serrano o si pertenece en más medida a una comarca que a otra. Estas disputas suceden, incluso, con fronteras oficiales, así que aún más cuando, como en este caso, los límites marcados no siempre responden a legalidades establecidas. Me remito a lo dicho anteriormente. Cualquier cambio motivado por algo de este tipo provocaría una distorsión irrelevante en cuanto a los resultados globales.
A continuación, veremos una tabla como la anterior, pero en este caso utilizaremos los límites de las tres provincias que contienen nuestros municipios. Estas fronteras son más políticas que las del caso anterior, y también más importantes. Pensemos, por ejemplo, que, para un Ayuntamiento, es diferente ser atendido por una Diputación Provincial que por otra. Este es el resultado:
Provincia
Comunidad Autónoma
|
Extensión
|
P 2014
|
P 2017
|
%
|
Densidad
|
Cuenca
Castilla-La Mancha
|
5832,29
|
17130
|
15898
|
-7,19
|
2,73
|
Guadalajara
Castilla-La Mancha
|
1918,87
|
6022
|
5591
|
-7,16
|
2,91
|
Teruel
Aragón
|
1414,11
|
4690
|
4483
|
-4,41
|
3,17
|
Para terminar de hablar de fronteras, busquemos una aún de trazo más grueso. Es la que divide las dos Comunidades Autónomas involucradas en nuestros municipios. Es otro importante límite a tener en cuenta, que afecta de forma crucial a la vida serrana. Ahí van las cuentas:
Comunidad
Autónoma
Provincia(s)
|
Extensión
|
P 2014
|
P 2017
|
%
|
Densidad
|
Aragón
Teruel
|
1414,11
|
4690
|
4483
|
-4,41
|
3,17
|
Castilla-La Mancha
Cuenca, Guadalajara
|
7751,16
|
23152
|
21489
|
-7,18
|
2,77
|
Podríamos jugar con los datos y presentarlos de mil maneras. Creo que no hace falta. Son tan rotundos que no hay forma de maquillarlos. Una densidad media de población que no llega ni a 3, con casi 2000 kilómetros cuadrados en la Serranía Alta De Cuenca en los que se alcanza una media de 1,43, convierte a estas tierras en la auténtica Zona Cero de la despoblación en España. De ahí el título de este artículo y de ahí que sea el ser humano una de las especies en mayor peligro de extinción en estas Sierras.
A efectos ilustrativos, para tratar de mejorar la comprensión de estas cifras, digamos que la densidad de población aproximada de Mongolia es 2, 3 la de Australia y 4 la de Mauritania. Para encontrar números inferiores hay que dirigirse nada menos que a Groenlandia. Pues aquí tenemos 32 municipios que no llegan a 1 y otros 40 por debajo de 2. De tranquilidad, al menos, podemos hablar.
Desde 2014 se ha perdido casi un 7% de la población (1870 personas). Y llueve sobre sobre mojado. La tendencia es demoledora. Muchas poblaciones están ya al borde mismo de la desaparición. Hay 12 municipios (los que tienen su nombre sobre fondo marrón) que han perdido en tres años más del 20% de su población. De ellos, Fuembellida y Megina están cerca del 40%. Podría argumentarse que casi todos son muy pequeños, pero es que hay otros 41 que en el mismo período han cedido entre el 10% y el 20%. Y así podríamos seguir...
El núcleo de población más grande de toda la zona, Molina De Aragón, con 3365 habitantes (que, por cierto, sigue acaparando más del 60% del total de su zona), no escapa a la tendencia y tiene 207 menos que en 2014. De los tres que superaban el millar en ese año, ya solo quedan dos, Landete y Albarracín, ambos también a la baja, sobre todo el primero de ellos. Priego, el tercero, ha sufrido una aterradora caída de casi un 10%. Si ni siquiera en las poblaciones más grandes esto se contiene, la batalla está perdida.
Los pocos datos positivos los ofrecen los 15 heroicos municipios que han ganado población a lo largo de los últimos tres años computados. Vale la pena nombrarlos porque en alguno de ellos es posible que esté el germen de una idea que permita revertir esta desoladora situación. En orden de ganancia son los siguientes: Huérguina, Arguisuelas, Terzaga, Tejadillos, Narboneta, Pajaroncillo, Algarra, Griegos, Carboneras De Guadazaón, Herrería, Bronchales, Torres De Albarracín, Boniches, Rubiales y Terriente. Dos más, San Martín De Boniches y Cueva Del Hierro (el único de la Serranía Alta De Cuenca que no pierde habitantes), se quedan como estaban.
Destacaría algunos aspectos de esta reducida lista. En primer lugar, diría que los tres primeros puestos (Huérguina, Arguisuelas y Terzaga) son de municipios que han elevado su población por encima del 20%. Con la que está cayendo, no es poca cosa. Lo segundo es resaltar el incremento en Carboneras De Guadazaón, superior al 6%, el único de la lista con un número de habitantes más cercano al millar que al cero. Por último, es significativo que encontremos cinco pueblos de la Sierra De Albarracín (Griegos, Bronchales, Torres De Albarracín, Rubiales y Terriente), pertenecientes a la única comarca encuadrada en la provincia de Teruel y, por lo tanto, a la Comunidad Autónoma De Aragón. Esto concuerda con el mejor resultado obtenido por esta con respecto a las otras tres, el cual es fácilmente observable en cada una de las últimas tablas presentadas. Sin ser una grandiosa diferencia, alguna reflexión debería plantearse en ciertas instancias del otro lado de la línea fronteriza de esa Comunidad. Trasmito esta idea, además, porque tengo la subjetiva opinión, simplemente como caminante serrano, de que en Teruel se observa más dinamismo que en Cuenca y Guadalajara. Digamos que es algo que se palpa en el ambiente y que creo que otros caminantes podrían corroborar.
Tampoco hay que hacerse muchas ilusiones con estos escasos datos positivos. Para no complicar el artículo no voy a publicar más tablas, pero he comprobado que en las últimas cinco mediciones censales del INE, correspondientes a los años 2013, 2014, 2015, 2016 y 2017 no hay ni uno solo de nuestros 131 municipios que haya aumentado población, o al menos no la haya disminuido, a lo largo de todos ellos. Quiere decirse entonces que un dato positivo puede perfectamente ser flor de un día o, en este caso, de un año. No se observa consistencia en ninguno de los casos ni se atisba un municipio que verdaderamente permita pensar en alguna posible fórmula de recuperación.
Es bastante simple exponer esta problemática, comparado con lo complejo que resulta aportar soluciones. Soy de los que piensan que se deberían buscar, pero estoy seguro de que hay quien opina que la despoblación no es un problema y por lo tanto no hay nada que arreglar. También, sin duda, hay quien gana con ella y no va a fomentar que se ataje.
El estado de la Sanidad en muchos pueblos está alejadísimo de la media del país. Si no diera tanta pena, parecería un chiste la historia de cómo se consiguió una ambulancia para atender a un montón de pueblos. Es tristísimo tener que pedir firmas, o acudir a imaginativas propuestas, para que no se cierren colegios. Es desolador comprobar que industrias que se fomenta que vengan a estas tierras sean absolutamente contaminantes en forma de residuos de uno u otro tipo. Es increíble que no haya máquinas quitanieves que garanticen en un tiempo razonable el transporte a un ciudadano, algo resuelto en casi todas partes. Parece mentira que ahora no se puedan hacer ciertos aprovechamientos agropecuarios que tradicionalmente se han realizado, siendo además beneficiosos para el medio ambiente. En el campo se prohíben muchas cosas, aunque recursos forestales faltan también bastantes. Es lamentable que el transporte a ciertas poblaciones esté siempre amenazado en su continuidad. El acceso a Internet y las nuevas tecnologías no está resuelto, ni mucho menos, en todos los pueblos. Las trabas burocráticas para emprendedores rurales siguen siendo tremendas. Así podríamos seguir... Sí, hay un problema. Y todo esto no anima a que más personas acudan a vivir a nuestros pueblos. Y, que no se engañe nadie, con las que hay actualmente lo que a estos les deparará el destino, ya se lo está deparando, es su lento y doloroso fin.
Está claro que no se tienen las mismas posibilidades en unos sitios que en otros, pero siempre que se cumplan unos mínimos, una comarca entera podría prosperar. Me temo, sin embargo, que las acciones emprendidas hasta ahora no van por el camino de alcanzarlos. Las Administraciones Públicas tienen mucho que decidir aquí. Ya no valen paños calientes porque la situación es realmente alarmante.
Los serranos también tienen que hacer autocrítica. Seguramente deban empezar por abandonar esa visión fatalista tan común por estos lares, ese sentimiento tan arraigado de que las cosas no tienen remedio, esa humildad con la que han aceptado su destino durante generaciones. Con sus escasas fuerzas, es necesario que alcancen una representatividad que, hoy por hoy, no tienen prácticamente en ninguna parte. Algunos alcaldes ya han destacado por intentarlo. Se necesitan muchos más. Y se necesita que se trate el problema como realmente es, exento por completo de ideologías, dejando de lado las garras de los políticos que lo usen para exhibir sus banderas, aprovechar determinadas coyunturas y, finalmente, arruinar cualquier posibilidad de solución.
Otros artículos de PuraSierra en los que, de una u otra forma, se ha tratado de la despoblación de nuestra zona, son los siguientes:
- Nuestras doce poblaciones pobladas más despobladas
- Casas De Frías, Villanueva De Las Tres Fuentes y Rento De La Peraleja, tres despoblados para conocer
- Chequilla, una escondida joya serrana que hay que conocer
La Herrería De Santa Cristina. Calle principal |
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Es un auténtico drama. Sin embargo, otros soñando todas las noches con cumplir algún día ese sueño de vivir en la Serranía.
ResponderEliminarAsí es Javi. Son las paradojas de la vida. No estás solo. Nos pasa a muchos...
EliminarUn abrazo,
Excelente artículo, enhorabuena. En Zafrilla, de los teóricos 67 habitantes censados no viven más de 50 de forma permanente en el pueblo. Un cordial saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias a ti. Calculo que a las cifras oficiales hay que descontarles al menos un 25% en nuestros pueblos. Corresponden a personas que viven solo una parte del año y saben que empadronados allí al menos le dejan un cierto beneficio a su municipio. También puede haber algunas cuestiones fiscales por medio.
EliminarSolo hay que darse una vuelta un día como hoy por Zafrilla o por otro de aquellos maravillosos pueblos para sentir lo que es la despoblación.
Bueno y cual es el problema de que disminuya la población en una zona protegida como parque nacional??.
EliminarQue no os vendan la moto, teneis el privilegio de vivir en un paraíso y hay intereses en que esto se acabe, todo por la pasta, que no os engañen, mayor población es mayor contaminación siempre, por suerte la planificación política tiene sus limites y no van a conseguir poblar una zona que es de la naturaleza, bien esta ahora, es una mentira los números, cuando llega el invierno no hay ni la mitad de los censados y en verano se multiplica de gente que tiene casa (que nunca pudieron vender) en el pueblo, dejan su dinero, presumen un poco y se marchan. Los pueblos no mueren pues no son seres vivos, y la naturaleza si lo es, y si mueren no pasa nada, lo que no puede morir es la naturaleza.
La gente contamina si o si, si quieres naturaleza virgen…pues ya sabes lo que es una virgen, en el resto del mundo luchan por mantener virgen la naturaleza expulsar a los colonos y agricultores y piensan que vosotros, que ya os la han metido siempre, vais a aceptar lo que os cuenten.
Por suerte no va a pasar, pero alguno se va a beneficiar.
Zafrilla, lo conozco, mi cuñada es de allí. Yo tengo segunda residencia en Morenilla(Guadalajara) hace 7 años hice una casa allí porque mi mujer es de ese pueblo.Cuando me jubile me iré largas temporadas, vivir todo el años no por el clima tan duro, se va un dineral en calefacción
ResponderEliminar"ciertos aprovechamientos agropecuarios que tradicionalmente se han realizado, siendo además beneficiosos para el medio ambiente"... Dudo que haya aprovechamiento agropecuario (o explotación de cualquier tipo) que sea beneficioso para el medio ambiente.
ResponderEliminar"ciertos aprovechamientos agropecuarios que tradicionalmente se han realizado, siendo además beneficiosos para el medio ambiente"... Dudo que haya aprovechamiento agropecuario (o explotación de cualquier tipo) que sea beneficioso para el medio ambiente.
ResponderEliminarEs posible que la palabra "agropecuarios" no sea la más adecuada pero me refiero, por ejemplo, a plantas silvestres cuya recolección está ahora prohibida o muy regulada. Cuando había gente que la hacía sin trabas, las plantas eran más vigorosas que en la actualidad. Otro ejemplo es que el monte ahora no está tan limpio como cuando, por muchos motivos más o menos "agropecuarios", el mismo era transitado y trabajado. Que no esté tan limpio es un factor más de riesgo de incendios forestales.
EliminarUna auténtica lastima. Si bien, si pensamos en el hecho de los cierres públicos (cuarteles de guardia civil, colegios, centros de salud) y privados (bancos, bares, restaurantes...) A esto le unimos la nula inversión pública en "crear" oferta turística el resultado es el que es.
ResponderEliminarYo me he criado en Tragacete, tenemos un puente romano con calzada que no ha tenido mantenimiento en 2000 años. Por qué no lo restauran? Por qué no invierten en hacer aflorar la calzada? Por qué no invierten en buscar asentamiento ibero / romano? Sería una forma de añadir interés turístico, la única forma de salvar dichas poblaciones.
Tocas uno de los puntos, el arqueológico, con más potencialidad de atracción turística. Hay más ejemplos en todas nuestras sierras como el que cuentas de Tragacete. No soy experto en absoluto en el tema pero conozco casos en los que personas con autoridad en la materia han reportado descubrimientos y no han tenido ninguna consecuencia por parte de los que tienen capacidad de inversión o de toma de decisiones (e incluso alguno con efectos contrarios a los que podrían esperarse). SOS Patrimonio Conquense (https://www.facebook.com/SOS-Patrimonio-Conquense-429927813806663/)y otras asociaciones luchan por mejorar esta situación.
EliminarOtro elemento negativo que contribuye a crear más pesimismo es el desencanto reinante entre los moradores de nuestra zona, primero, ante su propia incapacidad y después ante la aparente despreocupación de quienes algo podrían hacer, al menos, para alimentar la ilusión.
EliminarMuy cierto, Niceto. Como tantos otros, el problema se realimenta a sí mismo y se acaban juntando el hambre y las ganas de comer. Mi opinión, totalmente subjetiva, como caminante serrano, es que hay desilusión y desesperanza (lo que tú llamas desencanto) en muchísimos pueblos, aunque no en todos. Aun cuando no se arreglara el problema de fondo, porque depende de muchas más variables, creo que las Administraciones Públicas sí que deberían hacer algo para que los que allí quedan no caigan en una depresión colectiva en lo que respecta al futuro de sus pueblos.
EliminarMagnífico y desolador artículo. La comparación con Groenlandia me hace sentir una gran tristeza... Me alegra saber que " esto" se mueva, que haya alguna asociación que pueda aglutinar gentes preocupadas y con ganas de ocuparse....Creo que los pocos recursos que tenemos están escasamente aprovechados. Es el medio natural el mejor valor con que contamos y hoy por hoy la orientación al turismo rural podría ser una vía para frenar un poco la situación.
ResponderEliminarEn mi pueblo, Garaballa, el obispado de Cuenca, tiene un precioso hotel cerrado...est e junto al convento de la Virgen de Tejeda, muy aprevapre en toda la comarca. Se dice que el alquiler que impone el obispo es de 2000€ mensuales!!!!raz ra por la cual todos los profesionales que por ahí han pasado no han podido llevar el negocio adelante.
Podemos permitirnos el lujo de tener una instalación así, cerrada? Podría funcionar como hotel o como residencia de mayores, tan necesaria en la zona....Evidentemente sería un factor de dinamización social importante para el pueblo, pero, sin querer entrar en cuestiones políticas, hay derecho a esta situación? Contamos con la infraestructura, cosa excepcional en la comarca, pero permanece cerrada, tristemente.
No parece que al Sr Obispo le interese lo más mínimo el desarrollo de mi pueblo, ni siquiera la conservación de su propio patrimonio ya que manteniendo esos precios de alquiler hace imposible su viaviviabi.
Sería muy descabellado " pedir facilidades"?ofrecer la gestión a vecinos del pueblo o de la comarca? Pedir un precio mas razonable a cambio de su mantenimiento?
La Virgen de Tejeda atrae muchos visitantes, especialmente los meses de verano, pero todo el conjunto está cerrado y abandonado, solo la iglesia permanece abierta, también la tienda de medallas y recuer
dos, los festivos...Sugerirle que las ventas crecerían...
Después de leer el artículo, podemos permitirnos el lujo de desaprovechar estás instalaciones? Quiza los titulares, el obispado de Cuenca, si, nosotros, los garaballera y las gentes de la comarca, no.
Debemos seguir lamentandonos de la situación sin hacer nada por impedirla? Creo que no, es nuestra obligación moral mantener nuestros pueblos.
Desde aquí , os pido ayuda, de cualquier tipo para conseguir aprovechar este recurso, cualquier sugerencia nos puede venir bien...
Teruel tambien
existe, y Cuenca? Y la Serranía?
Solo en Agosto?
Lo de Garaballa es otro buen ejemplo de como están las cosas. A punto de perder un habitante por kilómetro cuadrado de densidad de población, y teniendo en cuenta que muchos de los censados en esta época ya no viven allí, y menos aún en el invierno. Son muchísimos los factores que lo han provocado, bastantes de ellos ya comentados en este artículo. Ayer leía en un periódico que mientras las AAPP no apoyen (y hablamos de dinero) a estas zonas como han apoyado a las zonas más ricas, hay poco que hacer. Tristemente, puede que sea así, aunque sigo pensando que hace falta también inteligencia, característica esta que no se exige a quienes mandan.
EliminarLo que puedo decir de nuestras Sierras, y esto es una opinión, es que faltan alcaldes comprometidos y que den guerra con las pocas armas que tienen a su alcance y mucha imaginación. Al menos pueden hacer ruido en este mundo mediático en el que vivimos. Hay algunos, dignos de admiración, que lo hacen y consiguen al menos cierta visibilidad, aparte de poner en el mapa el nombre de sus pueblos. Creo que los pocos votantes que van quedando deberían tener esto muy en cuenta. Sin esto, y sin unión, el "poder" lo tiene mucho más fácil para "desarrollar" estas comarcas a su antojo y montar en ellas lo que nadie quiere cerca de su casa. Cada vez estoy más convencido de que es deliberada la falta de representatividad que tienen.
Vosotros creía que en la comarca de molina de aragon se le desplace a algunos enfermos a realizar alguna pruebas o consultas hospitalarias de alguna especialidad a ciudad real ayuda a que nuestras familias vivan en esa zona con esos servicios a 500km?
ResponderEliminarNo OS habéis planteado que el hospital mas cercano a muchos pueblos lo tienen a pocos km,eso si de otra autonomía,y por lo tanto por la burocracia de las autonomías tienen que hacer cientos de km,eso ayuda a combatir la despoblación?en mi caso no,por qué ais familiares me los he llevado a otra autonomía mejor atendida.la gente al mínimo problema de salud tiene que huir de estas zonas tan alejadas de servicios básicos para el ser humano.
recubrimientosdekker.es
ResponderEliminarUna forma de comenzar a repoblar es mediante la creación de casas con aislantes e impermeabilizantes para durar. No solo promueve la conservación del medio ambiente, sino que también ofrece viviendas seguras y acogedoras.