Páginas

Libros serranos: 8 días a la semana. Una vida por los Montes Universales

8 días a la semana. Una vida por los Montes Universales

8 días a la semana es el título de una novela escrita por Ricardo Herranz Peris y publicada, en su primera edición, en noviembre de 2013. Es la ópera prima de este autor. Su subtítulo, Una vida por los Montes Universales, ya nos deja claro por dónde van a ir sus algo más de 400 páginas.

Ricardo Herranz desciende por línea paterna de la población de Griegos. Sus antepasados conocidos nacieron en lo más alto de la Sierra de Albarracín. En concreto, su abuelo Marcelino vino al mundo allí mismo en 1911.

A partir de la lectura de un manuscrito autobiográfico escrito por Marcelino en su vejez, Ricardo Herranz ha construido una obra literaria que merece la pena ser disfrutada por cualquier amante de la buena lectura. Su argumento es, en principio, bastante simple. Narra la vida de Marcelino desde su nacimiento hasta la finalización de la Guerra Civil Española en 1939.

Podría pensarse que la vida de un serrano de aquella época era muy anodina y no susceptible de ser novelada. Dos factores hacen que esto no sea así. En primer lugar, la humilde vida de un serrano, no solamente en esos momentos históricos sino desde siglos anteriores y hasta años más tarde, tenía muchos pasajes cargados de auténticas aventuras (desde los juegos de crío, en un entorno que meteorológicamente en muchas ocasiones era muy agresivo, hasta los viajes por la Sierra y también por fuera de la misma). El segundo factor deriva de las indudables dotes de Ricardo Herranz como novelista, con un estilo literario capaz de mantener la atención permanente por parte del lector y de la utilización de una serie de refuerzos perfectamente traídos a la novela, como la amistad entre Marcelino y la perra loba Luna, protagonista incluso de la fantástica fotografía de la portada.

Ya hemos calificado al libro por primera vez. Realmente se trata de una novela de aventuras. La vida serrana y el buen hacer de Ricardo Herranz así lo posibilitan.

Pero no nos engañemos. Que haya aventura no significa que la novela cambie la realidad. En absoluto. Lo que la misma relata no es ni más ni menos que lo que ocurría a Marcelino día a día. Y aquí el personaje trasciende a la historia. Marcelino ya no es Marcelino. Marcelino es, en realidad, cualquier varón serrano de aquella época. No había grandes diferencias entre un Marcelino de Griegos o uno de Huélamo o de Checa, pongamos por caso. Es una novela costumbrista y refleja la humilde vida, a veces miserable, pero siempre digna, de aquellas gentes nacidas en las mismas entrañas de los Montes Universales.

Las aventuras y desventuras de Marcelino, su perra y los entrañables personajes que hay a su alrededor forman un escenario absolutamente creíble que en determinados momentos emociona al lector. Existen pasajes, particularmente en todos aquellos en los que sale a relucir el obligado candor de los aislados habitantes serranos en su relación con personas de otras tierras, que reflejan perfectamente el alma serrana. La propia visión que se ofrece de la Guerra Civil, absolutamente desapasionada, responde a la realidad de cómo la misma se vio para la mayoría de la gente de nuestros pueblos. Para bien o para mal los tiempos se han encargado de transformar esa alma. Ya nunca será igual que era en los tiempos de Marcelino.

En la solapa del libro Ricardo Herranz se confiesa aficionado a la lectura. Tiene que ser más que aficionado quien domina de esa forma los recursos literarios a su alcance. Gracias a su buen uso el libro se convierte también en un entretenido tratado de gastronomía serrana. Recuerda, de algún modo, al magnífico El cementerio de Praga de Umberto Eco.

Del mismo modo desfilan por la novela, siempre bien traídas según la trama argumental, coplas, poesías, leyendas y otros componentes tradicionales del acervo cultural serrano. Es de agradecer la contribución del libro a que no se pierdan en la noche de los tiempos.

Los más mínimos detalles han sido cuidados en la novela. La original entrada de cada capítulo que incluye título, subtítulo y una cita, además de la fecha en la que se desarrollan los acontecimientos que narra, contribuye a mejorar su comprensión y lectura. Lo mismo ocurre con la tipografía utilizada y el adecuado empleo de cursivas, negritas y  demás recursos de impresión.

En definitiva, estamos ante una novela costumbrista y de aventuras, redonda en cuanto a su argumento, perfectamente escrita y con una serie de aditamentos que la hacen del máximo interés para cualquiera que tenga un mínimo interés en conocer la vida y cultura de los Montes Universales o simplemente quiera disfrutar de una más que agradable lectura.

Puede encontrarse información completa de novela y autor en los siguientes enlaces:

http://8diasxsemana.blogspot.com.es

Vista de Griegos desde la Muela De San Juan
Vista de Griegos desde la Muela De San Juan

PuraSierra. Todos los derechos reservados © 2018

Pulsa este botón si quieres este artículo en formato PDF
Pulsa este botón si quieres una suscripción gratuita a PuraSierra

2 comentarios:

  1. Me ha entrado el gusanillo por leer ese libro, seguro que es muy interesante esas gentes no eran simplonas como muchos creen, yo nacida y criada en Huesca al casarme e ir a conocer a mi familia politica a Lagunaseca descubri unas personas con tantas vivencias y a veces tan duras....
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes mucha razón Josefina. Ya te adelanto que voy a comentar dentro de poco un libro, escrito por una persona de Masegosa y publicado recientemente, que cuenta la historia de su vida. Es curioso como su vida es completamente paralela a la del protagonista de este libro (se llevan muy pocos años). Los problemas de la tierra y de los tiempos eran los mismos en Griegos y en Masegosa.

      Eliminar

Los datos proporcionados voluntariamente al hacer un comentario (incluida la dirección IP) son gestionados desde el panel de Blogger y almacenados en los servidores de Google. PuraSierra ofrece más información al respecto en su Política de privacidad y en su Política de cookies.